C.P.S.C. Joaquín Ballester

CENTRO POLIVALENTE SOCIO CULTURAL JOAQUÍN BALLESTER

Hace más de dos décadas la Colegiata recibió en herencia una familia un doble edificio en la calle Duque Carlos 15. La Colegiata destinó este edificio para la formación de jóvenes poniendo al frente del mismo a las Obreras de la Cruz, ayudando así a la Pastoral y a la Caridad de la misma. Catequesis, junior, caritas, formación de jóvenes… concentraba su actividad en este edificio, junto a los otros dos situados al lado del templo colegial.
Hace dieciséis años el edificio ya no podía sostenerse en pie por su deterioro y tenía que cerrarse, la feligresía de la Colegiata, representada en el Consejo de Pastoral, con su Abad al frente, D. Alberto Caselles, determinó que ese edificio debía dedicarse a una residencia de ancianos. Al hacerse cargo de la Colegiata el nuevo Abad, Ángel Saneugenio, de acuerdo con el Consejo de Pastoral decidió que no era ese el mejor destino sino que había que pensar en un centro polivalente que sirviera para actividades múltiples destacando entre todas ellas el ejercicio de la caridad.

Se pidió la ayuda de la Caritas Interparroquial, pero ésta no pudo aportar absolutamente nada.

Haciendo frente a un débito de más de 100.000? y siendo un solar en ruinas, se hizo frente a la construcción de un nuevo edificio, sufragado en parte por la Fundación de san Marcos de nuestra ciudad, y un préstamo que se solicitó a Bankia.
Cómo la acción de la caridad en la Colegiata es mínima, pues sólo habitan 3.000 habitantes en el territorio de la misma, y la caridad se centra sobre todo en el Preventorio, y en la ayuda a entidades exteriores a la comunidad, se decidió ofrecer la posibilidad de que Caritas Interparroquial de Gandía (formada por todas las parroquias de la ciudad), tuviese unos dignos locales para realizar sus actividades, ya que la sede de la Caritas Interparroquial, se encontraba también en otro lugar de la Seo, pequeño, altamente visible, nada discreto, y sin capacidad para realizar y llevar a cabo sus proyectos.
A lo que la Colegiata decidió dar la posibilidad de que todas las parroquias de Gandía, coordinen su acción caritativa en un lugar espacioso, moderno, discreto pero visible, y con la infraestructura necesaria. Este centro fue apodado con orgullo como «un Palacio para los pobres.»
A este lugar, no se le encontró otro mejor nombre, que el de Centro Polivalente Socio Cultural Joaquín Ballester. Un lugar referente de la Seo gandiense, ofrecido a la Iglesia en Gandía, para ejercer la labor social y caritativa de la Iglesia. Pero cumpliendo la voluntad de sus donantes de que este lugar sea para la Colegiata y determine siempre la Colegiata el uso que estime conveniente.

Joaquín Ballester Lloret nació en Tormos (Alicante) el 14 de diciembre de 1865, pueblo donde disfrutaba del derecho honorífico de Mayorazgo. Siendo muy pequeño se trasladó con su familia a Gandía. Allí estudió en el colegio de los escolapios hasta los diez años y posteriormente en Valencia cursó el bachillerato en el que hoy es el Instituto Lluís Vives. En esta ciudad completó su formación con la obtención de la licenciatura en Derecho. Durante sus años de estudiante universitario conoció al jesuita Antonio Vicent Dolz (1837-1912), padre del movimiento social cristiano y activo propagandista católico. La colaboración de Joaquín Ballester con el jesuita castellonense supuso para el tormense el inicio de una dilatada trayectoria dentro del catolicismo social.

Desde principios del siglo XX, Joaquín Ballester participa desde Gandía con el padre Carlos Ferris y otros propagandistas católicos, en proyectos vinculados al catolicismo social en las comarcas de La Safor (Valencia) y de La Marina Alta (Alicante). De esta actuación nacerán en Gandía instituciones como la Caja de Ahorros de Gandía (1900), el Gremio de Labradores (1903), la Unión Católica Gandiense (1905), la Caja de Crédito Popular (1905), el Patronato de Acción Católica de la Sagrada Familia para Obreros (1930), la Escuela del Ave María (1930) o la Mútua Escolar «La Esperanza» (1933). Entre 1924 y 1926, en plena dictadura primoriverista, desempeñó el cargo de alcalde de la ciudad de Gandía desde donde impulsa proyectos como la ampliación y empedrado del camino del Grau de Gandía y la carretera de Gandía a Oliva y reivindica la construcción de una carretera de Oliva al puerto de Gandía, la reversión al Estado de este puerto o la dotación oficial del Centro de Higiene de Gandía. En su tierra natal, la Marina Alta, desde su posición de prohombre de la derecha católica, promueve la construcción de las carreteras de El Vergel a Sagra y de Ondara a Orba, la prolongación de la línea de ferrocarril Silla-Cullera hasta Denia, pasando por Gandía y Oliva o la transformación en vía ancha de la línea Carcaixent-Denia. Una de sus grandes obras será el Preventorio Infantil Nuestra Señora del Amparo y la fundación de la colonia-sanatorio para leprosos de San Franciso de Borja en Fontilles.

Durante la Guerra Civil Española, Joaquín Ballester Lloret, por su relevancia dentro de la derecha católica valenciana y el peligro que él creía que ese hecho entrañaba para su integridad física, estuvo exiliado en Portugal. No obstante, su hermana, la monja carmelita Margarita Ballester Lloret, se refugió en su casa natal de Tormos con otras tres monjas carmelitas del convento de Dénia, al que todas pertenecían, y dos hermanos escolapios, uno de ellos, Luis Ripoll Ginestar, natural de Tormos. La vida de la hermana de Joaquín Ballester y de las demás religiosas y religiosos fue salvaguardada por el alcalde de Tormos, José Perelló Torrens.

Al acabar la Guerra Civil (1939), Joaquín Ballester regresa a Gandía y se reincorpora a los cargos que tenía con anterioridad a julio de 1936 como presidente de la Junta de Gobierno de la Caja de Ahorros de Gandía y del santorio de Fontilles. En diciembre de 1948, el Gobernador Civil de la provincia de Valencia lo condecora con la Gran Cruz de Beneficiencia. Su muerte se produjo el 1 de marzo de 1951, a los 85 años. Está enterrado en la iglesia del Sanatorio de Fontilles al lado del padre Carlos Ferris, fallecido en 1924. Desde la muerte de Joaquín Ballester Lloret hasta nuestros días desde las filas del catolicismo se ha pedido su beatificación, proceso que se inició en 2003.

Ubicación: C/ Duque Carlos, 15 46701 Gandia (Valencia)